Congelaciones

Son lesiones causadas por una exposición prolongada al frío, o corta pero intensa.Una congelación en los tejidos del cuerpo puede verse favorecida o acuciada por algunos factores .
Factores externos; baja temperatura, viento y humedad.
Factores internos; hipoxia y deshidratación.
Las congelaciones suelen producirse más fácilmente en los extremos de los miembros como pies y manos, puntos vulnerables como orejas, pómulos y punta de la nariz, y toda zona de la piel expuesta al viento.Lo mas peligroso de las congelaciones es que se producen sin dolor, por lo que hay que estar muy atentos para descubrir alguno de estos síntomas en nuestro cuerpo o en el de nuestr@s compañer@s en tiempo frío o con fuerte viento.

Síntomas:-Picazón en la piel.-Rigidez muscular en la zona afectada.-Zonas de piel hinchadas, entumecidas, rígidas o insensibles. Sensación de que la carne se ha convertido en madera.-Zonas de piel cerosas, blanquecinas o ennegrecidas (paso intermedio hacia una necrosis progresiva del tejido).

Grados de congelación: En el menor de los casos casos nos podemos encontrar con el serio aviso de dedos de los pies o las manos u otra parte del cuerpo que se vuelve algo insensible y rígida. Cuando los recalentamos se produce un entumecimiento doloroso que indica que se recupera la sensibilidad.Al igual que las quemaduras, las congelaciones se clasifican en tres grados:-

Primer grado; Palidez, eritema en el postcalentamiento, ligera cianosis y sensibilidad reducida. La parte del cuerpo se enrojece y se hincha. Se recupera al cabo de unos días.
-Segundo grado; Se forman ampollas, eritema y cianosis más persistentes, sensibilidad más reducida o ausente. La zona congelada puede evolucionar hacia una necrosis o hacia una completa restitución, aunque lo más normal es que cicatrize en pocas semanas, pero la sensibilidad puede no recuperarse hasta pasado incluso varios meses y surgir posibles secuelas de hipersensibilidad al frío.En una congelación profunda de segundo grado (palidez, cianosis importante, anestesia del tejido, etc.) la necrosis se limita a la dermis y se da una curación a las cuatro o seis semanas con secuelas.
-Tercer grado; Se origina el edema, la zona se vuelve gris y gangrenada para luego ser invadida por una necrosis profunda, llegando a aparecer la anestesia total y la muerte si no se trata; su evolución degenera en la necrosis afectando al hueso, la amputación y una serie de secuelas inevitables, incluidas las psicológicas.

Prevención: en condiciones de temperatura muy baja:-Ir siempre bien abrigado sin exponer durante mucho tiempo zonas del cuerpo al exterior o al viento.-Los guantes, el pasamontañas y un calzado aislante, son imprescindibles. -No llevar vestimenta ni prendas ceñidas que impidan la circulación sanguínea. -Hacer ejercicios con los músculos de la cara para favorecer el riego e impedir la aparición de costras.

Tratamiento: El tratamiento de las congelaciones es algo complicado y sutil, ya que los miembros congelados una vez recalentados se hinchan y no se puede hacer mucho más, por ejemplo en el caso de los pies una vez descalzos estos se hinchan y no se pueden volver a calzar. Si no nos vemos seguros de actuar correctamente es mejor pedir ayuda urgente, esperarla o evacuar al herido.-NUNCA exponer una zona congelada al fuego.-Se han demostrado muy contraproducentes las antiguas friegas con nieve o alcohol, los azotes con las cuerdas, los baños con agua hirviendo o los alternativos en agua fría y caliente. Las zonas afectadas aunque se encuentran insensibles siguen siendo igual de frágiles que antes.-Una buena recuperación se puede lograr mediante un calentamiento general del cuerpo, tomando abundante líquido, siendo más eficaz aún la ingesta de bebidas calientes.-El tratamiento de las zonas congeladas se puede llevar a cabo mediante un baño en agua tibia (37-40 ºC) con una solución antiséptica yodada durante 30 minutos. Esta acción terapéutica ha de darse repetidas veces. Después ha de recubrirse con material estéril y proteger con vendajes que no compriman. También se prescribe el uso de analgésicos, pues suele haber un dolor intenso.Deben emplearse antibióticos para evitar infecciones, sobre todo si aparecen ampollas que no deben secarse o drenar porque protegen el tejido.

Fuente : Internet