Hacia Rutas Salvajes . Sean Penn




















Es el nuevo trabajo de Sean Penn esta vez como director. Reconozco que no puedo ser objetivo con este tipo. Me ha regalado momentos memorables con sus interpretaciones de desasosegante asesino en Pena de Muerte, de afligido padre con turbio pasado en Mystic River o de miserable picapleitos en Atrapado por su Pasado. Junto a Daniel Day-Lewis , los herederos naturales del gran De Niro, el de Toro Salvaje o Taxi Driver.

Como director siempre me ha parecido interesante, creativo, con un formalismo visual bastante notable, pero quizás aducía de una intencionada sobriedad emocional que le otorgaba a mi entender cierto distanciamiento , paradójicamente todo lo contrario que sus pasionales interpretaciones.

En Hacia Rutas Salvajes, basada en la novela de Jon Krakauer, el mismo escritor del Mal de Altura que comentábamos el post anterior, Penn nos cuenta la historia real de un joven de buena familia que decide dejarlo todo, después de graduarse en la universidad insatisfecho de la sociedad que hemos construido por irse a vivir otra vida en la que la libertad y la naturaleza forjaran su espíritu.

El resultado de la película depende en gran medida del animo con el que se entre en la sala. Desde luego los que se pasan la vida trabajando para acumular objetos y propiedades, los que consideran lo más cercano a la felicidad unas nuevas llantas de aleación para su flamante coche mejor que no se acerquen a verla. Citando a un conocido político aspirante a regir los destinos de la patria les parecerá el protagonista un "bobo solemne. "

Es cierto que con una mirada un tanto severa puede parecerte pueril, llena de tópicos y una puesta en escena excesivamente retórica. Puede ser difícil identificarse con el personaje o parecerte filosofía banal. Sin embargo el hecho que la pantalla este narrando un hecho que sucedió realmente, que el personaje fue una persona puede contribuir a atenuar estas impresiones. Visualmente poderosa, como todas las del director, y no solo por las esplendidos imágenes de los paisajes de Alaska (el impresionante monte McKinley como fondo) o el Gran Cañon del Colorado. Desea Penn trasmitir adecuadamente las interioridades de Chris McCandless, su viaje de introspección. Puede que los excesivos flash back cortan demasiado el ritmo a la narración, que se haya excedido con el metraje, que los personajes que se va encontrando nos parezcan un tanto naíf, planos y estereotipados, que salvo el anciano al que da vida Hal Holbrook, no trasmitan, aunque lo pretendan, demasiadas sensaciones, que adolezca de intensidad salvo la parte final de la película ,que la personalidad de alguien capaz de tomar tales decisiones no se vea adecuadamente reflejada, pero le agradezco el intento de realizar un cine personal, independiente, con estilo propio y al margen de la taquilla. No es desde luego una obra maestra pero en conjunto es un trabajo correcto y es sobre todo una historia merece ser contada.

Mención aparte merecen por un lado la interpretación de Emile Hirsch, quien soporta el peso de la película. No podía ser de otra manera siendo quien es su director. Magnifico, desde el irritado universitario, pasando por el encantador vagabundo hasta llegar a las emocionantes escenas finales. Y por otro la música de Eddie Vedder, cantante de Pearl Jam, que se encarga de la banda sonora original y que al igual que la imagen , no solo acompañan sino son autenticos protagonistas .